viernes, 15 de mayo de 2009

La pluma y el pincel

Hoy me ha parecido escuchar tu voz en el susurro del viento. Me giré, pero tú no estabas. Hum, lo de siempre.
También te vi brillar en un rayo de sol, y unas ondulaciones en el agua borraron tu imagen de ella.
Los árboles me cuentan que estás lejos, que quizá no te vuelva a ver. ¿Es cierto? No sé donde enviar mis cartas, las guardo aquí en la cómoda, esperando que algún día las leas.

Me gusta imaginarte recostada en un árbol, con una sonrisa en los labios, una rosa en el corazón y un dibujo entre las manos. Con la piel bronceada y el pelo algo decolorado por el sol, con los ojos en ese tono entre marrón y verde que se te pone a veces, pintando la ninfa que viste pasar hace un rato.
Para mí.

Guardo mis cartas para ti, guardas tú las pinturas para mí?

Y, las recibiremos algún día?

lunes, 4 de mayo de 2009

Ja

Es que no podemos ser felices sin mas?

Creo que en el fondo nos gusta torturarnos, que cuando conseguimos lo que queremos, cuando todo empieza a marchar bien, entonces buscamos algun otro inconveniente, en realidad tenemos miedo a la felicidad. Ah, esto ya se ha solucionado, pues ahora me molesta lo otro.

Sinceramente, no se por que la gente habla tanto de ser feliz, de lo maravillosa que es la felicidad. Si en el fondo la odian! si, parece que queremos ser felices, disfrutamos de los momentos alegres, pero en el fondo rehuimos de ella, siempre buscamos alguna pega. La gente no puede vivir sin pensar en sus problemas, y por eso siempre procura tener la cabeza ocupada con alguno.

No, no podemos limitarnos a ser amables, a procurar que nos vaya lo mejor posible, a mirar lo mejor de los demas en lugar de intentar encontrar que hace el otro que nos ofenda, que no nos guste, que se le pueda echar en cara.

Vivimos echos de rencor, no se perdona, no se olvida.

Es que no podemos ser felices sin mas?

Por favor...